La salud mental de los jóvenes en Colombia es una preocupación creciente que requiere atención y acción inmediatas. Las estadísticas son alarmantes: según el Ministerio de Salud, el 44,7% de los niños y jóvenes en el país muestran signos de problemas de salud mental, incluyendo a aquellos entre 6 y 24 años. La situación es aún más grave al considerar que en 2023 se registraron 230 suicidios en este grupo etario.
Factores Desencadenantes y Crisis Silenciosa
Violencia Doméstica y Acoso Escolar
La violencia doméstica y el acoso escolar son factores que contribuyen significativamente a esta crisis. Los jóvenes enfrentan situaciones difíciles en sus hogares y escuelas, lo que afecta su bienestar emocional y mental.
Conflicto Armado y Trauma
El conflicto armado en algunas regiones de Colombia también deja secuelas en la salud mental de los jóvenes. La exposición al trauma y la violencia tiene un impacto profundo en su desarrollo psicológico.
Consumo de Sustancias Psicoactivas
El consumo de sustancias psicoactivas, como el alcohol y las drogas, es otro factor que contribuye al deterioro de la salud mental juvenil. La falta de acceso a programas de prevención y tratamiento agrava esta situación.
Desmontando Mitos y Fomentando el Diálogo
Campaña “Abraza tu Mente”
Unicef Colombia ha lanzado la campaña ‘Abraza tu mente: de salud mental sí hablamos’ para combatir los estigmas y fomentar un diálogo abierto sobre la salud mental entre niños, adolescentes y adultos. Es fundamental que la sociedad entienda que hablar sobre estos temas no es un signo de debilidad, sino de valentía y cuidado.
Podcast “On My Mind”
La organización también ha presentado un podcast en colaboración con Spotify, llamado ‘On My Mind’, para ofrecer apoyo psicológico a jóvenes que no tienen fácil acceso a estos servicios. A través de este medio, se brindan herramientas y consejos para manejar el estrés, la ansiedad y otros problemas relacionados con la salud mental.
Compromiso Colectivo
La salud mental debe ser una prioridad en la agenda nacional. Padres, educadores, profesionales de la salud y líderes comunitarios deben unirse para crear entornos seguros y de apoyo para los jóvenes. Solo así podremos construir un futuro más saludable y resiliente para las próximas generaciones.
En resumen, la salud mental de los jóvenes colombianos es una responsabilidad compartida. Es hora de actuar y brindarles el apoyo que necesitan para enfrentar los desafíos emocionales y psicológicos.