El consumo de Omega-3, presente en cápsulas y ciertos alimentos, ha sido asociado durante años con mejoras en la salud cardiovascular y cerebral. Recientemente, un estudio sugiere que también podría disminuir el riesgo de desarrollar Alzheimer.

Entre los alimentos recomendados por los expertos, el pescado azul ocupa un lugar destacado en las dietas saludables. Ejemplos de este tipo de pescado son las sardinas, el atún y el salmón, que son ricos en Omega-3. Este ácido graso esencial, al ser metabolizado por el organismo, ofrece diversos beneficios. Para aquellos que no consumen pescado azul regularmente, los suplementos de aceite de pescado son una alternativa viable.

Aunque algunas afirmaciones sobre los beneficios de los aceites de pescado han generado debate, la nueva investigación apunta a que el Omega-3 podría jugar un papel crucial en la reducción del riesgo de desarrollar Alzheimer, una forma de demencia que afecta a millones de personas en todo el mundo.